Sistemas de plantación y marcos utilizados

Los agricultores canarios suelen plantar estos cultivares a profundidad variables, debiendo esta ser la adecuada a las condiciones en que se encuentre la tierra, estado de la simiente, etc., entre las que podemos señalar:

La siembra superficial o tapado del tubérculo con poca tierra, se debe realizar en los casos siguientes:
i. En la siembra temprana o de enero (veranera), evitándose de esta manera los encharcamientos por altas precipitaciones, durante el periodo vegetativo.
ii. Con tubérculos de siembra poco vigoroso (semilla vieja).

La siembra profunda , con surcado próximo a los 20 cm de profundidad y cerrado de surco en su totalidad, se realiza:
i. En las siembras de verano, tardía o agostera (invernera), con el objeto de evitar las altas temperaturas de las capas superficiales del suelo.
ii. Cuando se prevén condiciones de sequía, durante o después de la siembra.
iii. Cuando existe alto riesgo de ataque de polillas, gusanos de suelo, etc.
Al ser cultivares casi exclusivamente de terrenos de secano, lo normal era sembrarla a densidades bajas, aprovechándose mejor las lluvias y quedando el follaje más holgado, ya que éste tiende a desarrollarse bastante, al igual que el sistema radicular. En caso de efectuarse la plantación en terreno de regadío se aumentaba un poco dicha densidad [Chico, 1986].
Tradicionalmente la siembra se realiza a mano puesto que la orografía del terreno, las dimensiones de las parcelas y la escasez de recursos de los agricultores, no han permitido mecanizar la siembra. Este método tradicional, supone demasiados jornales, sin embargo, no por eso deja de constituir un buen método. La forma actual de realizar la siembra se resume en:

    1. Apertura manual de surcos mediante azada o pequeño motocultor.
    2. Colocación de la simiente en el fondo del surco a una distancia variable.
    3. Abonado de fondo a lo largo de surco o entre papas.
    4. Incorporación directa de estiércol al surco o a la totalidad del terreno unos meses antes de la siembra.
    5. Tapado o cierre del surco mediante azada o motocultor.

El marco de plantación
suele ser variado y depende de la zona de localización geográfica, etc. Podemos esquematizarlo en:
•  La separación entre surcos oscilando entre 60 a 75 cm para la vertiente norte y alrededor de 50 cm para la vertiente sur. Esta separación no sólo varía por su localización, sino por el material de siembra utilizado (tamaño, época de siembra).
•  Entre tubérculos es normal “plantar al pie”, consistente en situar las papas en el fondo del surco a un pie de distancia (aproximadamente de 20 a 30 cm ).
•  La profundidad tradicionalmente de plantación se sitúa entre 15 a 20 cm .
•  Esto supone una densidad de plantación de 50.000 a 100.000 tubérculos por hectárea.




Fuente:

•  Propuesta de Reglamento de la denominación de origen “Papas antiguas de Tenerife”, Tomo I, (Ríos et. al 1999).
•  Web Papas Antiguas de Canarias.